110

Hoy, si me lo permitís, voy a ser un poco más extensa, porque creo que el tema lo merece.

Soy una persona inconformista, y muchas veces incluso incendiaria y anti-sistema, y como tal, mi primer instinto al ver por primera vez la noticia de la limitación a 110km/h, fue sin duda, enfadarme, sentirme utilizada y renegar contra este gobierno que nos impone su voluntad a modo de decretazo, rayando en multitud de ocasiones la dictadura.

Pero señores, hoy, tras haber leído artículos, noticias e incluso blogs de gente muchísimo más formada e ilustrada en el tema que yo, creo sin duda alguna que nos hemos quedado en el debate superficial de si el gobierno es o no quien para imponernos esta medida ultrajando nuestra libertad. Pero nadie, o muy poquitos han reparado en el verdadero problema que subyace bajo toda esta polémica. España importa un porcentaje elevadísimo de la energía que usamos y además tiene un problema económico grave que no se ve beneficiado por la importación de petróleo y que a largo plazo agravará el problema, porque como de todos es sabido, el precio incrementa mientras escribo. 

Dado que la naturaleza se queda sin petróleo y la ciencia anda lejos de poder crearlo en un laboratorio ¿¿Qué haremos cuando las reservas de petróleo se acaben o cuando su precio sea tan desorbitado que sea imposible asumirlo?? ¿Por qué no nos hemos centrado YA en medidas para solucionar el problema a largo plazo y no en medidas temporales y cortoplacistas que no van a ningún sitio? ¿Dónde están los coches que como el delorean  más famoso de la historia funciona con material orgánico? 

Mi más sincera opinión es que la limitación a 110 es una medida NECESARIA pero a la vez INSUFICIENTE y PRECIPITADA, con un carácter impositorio que no ha sentado nada bien y que por sí sola no es muy útil; no seré yo quien decida qué medidas son las que deberían acompañarla, pero sí diré que puede que los tiros vayan por fomentar y financiar las energías renovables con un uso REAL y practico en nuestra vida cotidiana (¡vivo en la costa del sol y no veo que nadie tenga en sus tejados placas solares!), el fomento del transporte público y hacer que nos sea rentable usarlo. Y probablemente otras muchas que no llego a ver por mi misma.

Puede que este post haga que salga un tanto escaldada, pero si hace a alguien pensar un poco (aunque llegue a diferentes conclusiones) me daré por satisfecha.

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HABLAR BIEN NO CUESTA NADA

Estando en la consulta, tras  explorar a una niña, se le indica a la madre que ya puede vestirla y esta dice (y cito textualmente) “venga chocho que ya nos vamos” repito chocho. ¿¡¿SE PUEDE SER MÁS VULGAR?!?

Por suerte o por desgracia para los hispanohablantes el castellano es un idioma amplio y rico como ninguno en vocabulario, por eso en mi corto entendimiento, no llego a comprender porque se recurre a sobrenombres tan ordinarios y barriobajeros como chocho, chochete o picha… sobre todo cuando contamos con otros pseudónimos tan dulces, cariñosos, tiernos y tan apropiados para dirigirnos a nuestros hijos (en este caso) y a nuestros seres queridos en general como: cariño, cielo, tesoro, vida, peque…y otros miles que se nos ocurran… y que no sean una chabacanería.

Puedo llegar a pensar que en ciertos ambientes socioculturales esto sea normal, pero sospecho (por no decir que estoy segura) que la telebasura, los grandes hermanos y las Belenes Esteban que invaden las televisiones de este nuestro país, hacen que se extiendan este tipo de palabras a otros ambientes socioculturales mas normales y se hagan poco a poco un sitio en nuestro vocabulario habitual, hasta que nos parezca incluso normal usarlas y no nos duela el oído al escucharlas. ¡Inadmisible!

¡¡Hablar bien no cuesta nada!!

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Nos roban internet

“Las redes sociales son importantísimas, ministra, dejame que te diga un presentimiento que ahora mismo tengo: (…) estas ansias de impulsarla (la cultura) creara en algunos de vosotros, la tentación de controlarlo; y hemos controlado o hemos intentado controlar primero a las mujeres hasta que nos dimos cuenta que no eran propiedad nuestra, luego los hijos (…) y nos pasa lo mismo con los animales… Y espero que no nos pase lo mismo con internet.” E. Punset.

Y mi reflexión es: ¿no seria mas sencillo y menos polémico llevar la cultura al alcance de todos? Ayer fui al cine, 6.50 euros la entrada con descuento joven, por una película de tan mala calidad que si me hubiera quitado las gafas no habría notado la diferencia; 20 euros por un libro de tapas duras, muy decorativo desde luego;  entre 15 y 20 euros por un CD de música, con muchas fotitos…y asi, con toda la “cultura” en este país. ¿¿De verdad piensan los “cualificados” ministros y ministras de España, que con la ley sinde, la gente ira más al cine o comprará mas libros?? Si el paro aumenta sin cesar y las ayudas sociales se reducen a cada minuto, ¿de donde van a sacar los españolitos de a pie el dinero extra para darse el capricho (porque es eso, un capricho) de acercarse a la cultura? 

Solo espero que seamos capaces de encontrar un vacio legal en esta “extraordinaria” ley. Porque como dijo Alex de la Iglesia, Internet es el futuro; y yo personalmente tengo la sensación de que nos lo están robando.

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